Costo: $160.
Horario: A partir del 10 de octubre a las 20:00 hrs. 1 y 2 de noviembre, dos funciones: 19 y 21 horas.
Duración: 90 min.
Lugar de la puesta en escena: Isla de Tlalic. Embarcadero de Cuemanco, Xochimilco.
Promoción: ¿Quieres irte a ver este espectáculo el viernes 7 de noviembre? Manda tu calavera literaria a cr.ccm@itesm.mx. Las tres mejores se llevarán un pase doble para este espectáculo.
TEATRO
Déjate transportar a las entrañas de un México de antaño, donde la Llorona con su llanto te lleva de la mano a conocer sobre su historia en una trajinera en medio de los canales de Xochimilco.
Desde el primer momento en el que ví el cartel del espectáculo me ví en la enorme necesidad de lanzarme y observar el espectáculo con mis propios ojos. Ya había escuchado de diversas voces que era algo que no podía dejar de ver, y finalmente el pasado 24 de octubre tuve la oportunidad de embarcarme y conocer esta historia.
La salida se efectuó desde el embarcadero de Cuemanco, a espaldas de lo que es la Pista de Canotaje en esa misma zona. Quizá lo que es un poco incómodo es la salida en medio de lo que se ha vuelto ya un pasaje chelero a la altura del embarcadero de Nativitas. Sin embargo al subirte a la trajinera empiezas a adentrarte en la mismísima leyenda de la Llorona. Y es que en medio de un camino iluminado con antorchas, estratégicamente colocadas en las chinampas, pareciera que por momentos has dejado la ciudad de México y has regresado a 1519, justo antes de la llegada de los españoles a Tenochtitlan.
Finalmente la trajinera llega a la isla de Tlalic, que es donde se representa la obra. Sobre la isla es visible un grupo en vivo que empieza a amenizar la espera de lós demás visitantes que no dejan de llegar en sus trajineras. Éstas cabe destacar que se colocan una a una frente a la isla para poder dejar a sus visitantes el espectáculo.
De pronto se da la tercera llamada y el espectáculo empieza. La llorona empieza su llanto y flota sobre los canales de Xochimilco para dar comienzo a la obra. Primero contándonos los días antes de la llegada de los españoles a Tenochtitlan, cuando por aquellos tiempos la madre de los Aztecas lloraba por lo que se avecinaba a sus hijos. Es ahí que la imagen de la llorona se encuentra presente en nuestras vidas. Después de esto se cuenta la segunda versión de la historia, donde se nos platica de la unión de una indígena con un caballero español.
La puesta en escena combina bailes y música prehispánica, que usando como fondo una pirámide, nos transporta a los tiempos en los que se supone inició la leyenda de la Llorona. Lo único malo en este momento, es que por aquellas horas es posible escuhar a uno que otro borracho que empieza a gritar en momentos culminantes de la obra.
Así es, ese quizá sea uno de los defectos de que se lleve a cabo en este sitio. Si bien no se puede satanizar esto, la magia del espectáculo puede llegarse a perder y sobre todo, el respeto a los actores que hacen su trabajo con mucho profesionalismo.
¿La recomendación? Llegar a las 18 horas a comprar tu entrada y formarte inmediatamente. Si puedes sentarte frente a la punta de la trajinera, es lo mejor, para que puedas ver el espectáculo sin que nadie te estorbe.
Por
Enrique Figueroa Anaya
Productor Kiosko
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